martes, 8 de octubre de 2019

Los dibujos fotogénicos de Hyppolite Bayard

Hyppolite Bayard es considerado uno de los cinco padres de la fotografía. Fotógrafo e inventor francés, nació en 1801  y se dedicó entre otras cosas a investigar la fijación de imágenes. 

Sustituyó las placas que se solían usar en fotografía (daguerrotipo) como soporte por papel y combinándolo obteniendo un positivo directo que se denominó dibujos fotogénicos. 
Las imágenes tienen más contraste y están más definidas aunque presentan menos detalles.

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Bayard, Hippolyte - Bildnis der Mlle X. (Zeno Fotografie)


Para obtener la imagen impregnaba un papel con sales de plata (cloruro de plata) y dejado a la luz del día hasta que se ennegrecía. En ese momento, las sumergía en una solución de yoduro de potasio que exponía húmeda en la cámara pegada a una pizarra. La imagen final se lograba al bañar la plata en hiposulfito o en cianuro.
Sus descubrimientos hicieron que la Academia de Bellas Artes le elogiara y la prensa se hiciera eco de las nuevas técnicas de revelado. Sin embargo, la fama fue efímera y en un año el público y la academia le dieron la espalda.

Bayard intentó por todos los medios que las altas esferas y el gobierno francés le ayudaran en su trabajo, pero ya estaba decidido que todo el apoyo iba a ser para Daguerre y su invento el Daguerrotipo, así que lo más que recibió fueron 600 francos. 
De esta forma pasó a ser el fotógrafo que murió dos veces: con el fin de dar a conocer su trabajo, Bayard, elaboró una serie de retratos que hoy conocemos como "El ahogado", en la imagen aparece él mismos cubierto de polvos de talco con el fin de dar un tono más pálido. La foto acompañada del siguiente texto, recorrió las calles de Paris:

"Este cadáver que ven ustedes es el del Señor Bayard, inventor del procedimiento que acaban ustedes de presenciar, o cuyos maravillosos resultados pronto presenciarán. Según mis conocimientos, este ingenioso e infatigable investigador ha trabajado durante unos tres años para perfeccionar su invención.
La Academia, el Rey y todos aquellos que han visto sus imágenes, que él mismo consideraba imperfectas, las han admirado como ustedes lo hacen en este momento. Esto le ha supuesto un gran honor, pero no le ha rendido ni un céntimo. El gobierno, que dio demasiado al Señor Daguerre, declaró que nada podía hacer por el Señor Bayard y el desdichado decidió ahogarse. ¡Oh veleidad de los asuntos humanos! Artistas, académicos y periodistas le prestaron atención durante mucho tiempo, pero ahora permanece en la morgue desde hace varios días y nadie le ha reconocido ni reclamado. Damas y caballeros, mejor será que pasen ustedes de largo por temor a ofender su sentido del olfato, pues, como pueden observar, el rostro y las manos del caballero empiezan a descomponerse.
H. B. 18 de octubre de 1840"

                                                                          
                    
Podríamos decir que es de las primeras fotografías conceptuales, en la que la composición es tan importante como la finalidad de la imagen. 
A pesar de no ser tan reconocido y que dejó de investigar debido a la falta de apoyos, gracias a su labor se organizó la primera exposición fotográfica de la Historia en 1839 para ayudar a los damnificados de un terremoto, participó en la primera Exposición Universal y entre sus 600 obras hay bodegones, paisajes y retratos.

Supongo que en algún momento de la vida todos somos Bayard, realizamos cosas que no son reconocidas o cuya gloria o beneficio se lleva otra persona, sin embargo, al final la verdad siempre sale a la luz.

Mar RG